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Rodney Araujo Moya
Born in 1945 in Montevideo,Uruguay. Yo comencé a pintar en mi juventud, cuando vi que en la pintura se manifestaba un misterio. Había algo que me hablaba desde un lugar profundo, y ese lugar sin duda debía de estar dentro mío, ya que la obra era algo externo a mi, yo siempre cito una frase de Federico Fellini que dice que “El arte es el rumor de un mar que no podemos ver.” Creo que esa es una buena aproximación ya que no podemos definir con precisión de que se trata el fenómeno artístico, la prueba es que a pesar de que durante milenios se ha venido hablando de arte, nadie puede crear una obra de arte porque se haya tragado toda la teoría del arte. En la Escuela Nacional de Bellas Artes a la cual asití, a los egresados no se les entregaba un diploma de artista, sino que se les entregaba un certificado de asistencia a los seis años que duraba el curso. Haber asistido al curso no era una garantía de que el alumno iba a ser un artista. Solo se le habían enseñado los rudimentos básicos con los cuales el mismo podría comenzar a trabajar. Creo que el trabajo del artista es comenzar el duro camino hacia la libertad, un camino durante el cual aprendemos a liberarnos de todo prejuicio artístico, hasta darnos cuenta de que la vieja frase del poeta: “Caminante no hay camino…..” sigue teniendo vigencia. No hay caminos prefabricados, el camino hacia la libertad es individual. Se dice que los seres humanos somos libres hasta el límite de nuestra piel, yo digo que ni hasta ahí somos libres, porque del límite de nuestra piel hacia dentro tampoco somos libres ya que estamos expuestos a los dictados físicos de nuestro cuerpo a la formación previa y los límites psíquicos que nos impone la educación, de ahí que la única posibilidad de libertad yo la encontré en la pintura.
Bien, entonces comenzamos a transitar el camino hacia el develar el misterio del arte, un camino difícil, tan difícil que a lo largo del mismo tratamos de aprehender de todo para tratar de aprender a pintar, el resultado final de todo eso es un proceso parecido al del alquimista , el cual tratando de encontrar la piedra filosofal con la cual transmutar la materia, termina por descubrir que la verdadera transmutación se produjo en el mismo. Así que el arte se termina transformando en un proceso mágico, tan mágico como la Creación, porque en este universo todo es mágico, sólo que estamos tan inundados por la magia que dejamos de verla, un amanecer, algo tan común como para que ocurra rutinariamente todos los días, nos hace perder esa visión mágica del universo, una pequeña semilla puesta bajo la tierra, unos años mas tarde se transforma en un árbol de 20 metros de altura, eso cualquiera lo sabe , así que en consecuencia eso le hace perder toda validez mágica, pero si yo entierro una semilla y digo “Abracadabra” y en forma instantánea apareciese el árbol, entonces diríamos que es magia pura. Pero no es menos mágico que ese proceso dure 10 años en lugar de 10 segundos. El proceso creativo del artista no es menos mágico, el pintor se para frente al caballete con sus herramientas y al terminar el día sobre el lienzo blanco aparece mágicamente una obra de arte, salida de un lugar desconocido al cual el artista aprendió a ir. No sabe el camino pero sabe como ir. Un contacto con la fuente de la creación, una meditación con operatividad, una forma de contactar con la Deidad creadora y desde ahí poder recrear el mundo, y cuando me refiero a recrear lo hago como algo práctico y funcional, se ha dicho muchas veces que la realidad imita el arte y eso no es un juego de palabras, para mencionar un ejemplo simple cito a Cortazar cuando en Rayuela menciona que : “ La Maga se agacho en la playa y recogió un guijarro” Miró… es un ejemplo simple de como un pintor puede ayudarnos a ver una forma de la naturaleza desde una óptica diferente. El arte puede ser funcional y podría modificar nuestra percepción de la realidad y de ese modo cambiar el mundo, y no lo digo simbólicamente sino que me refiero a un cambio real del mundo tangible.
Y eso que nos parecía imposible debido al concepto de que vivimos en un mundo materialmente sólido, se hace mas entendible hoy en día debido a los últimos descubrimientos dentro de la física cuántica que nos demuestran que vivimos en un mundo de energía, un mundo construído solamente por vibraciones electromagnéticas donde no existe materia sólida sino que vivimos en un universo de vibraciones, como mencionaba Carlos Castañeda citando a Don Juan: “No vivimos en un mundo de objetos, vivimos dentro de las emanaciones del Águila.” Partiendo de esa base el artista podría modificar la realidad mostrando los universos posibles a través del arte. Usando el mismo como una forma de manipular la realidad abriendo nuevos caminos “al andar.”
Misterio, vivimos en un mundo de un misterio insondable, un mar de misterio donde los pintores navegamos buscando el rumbo correcto usando un pincel como brújula..
Born in 1945 in Montevideo,Uruguay. Yo comencé a pintar en mi juventud, cuando vi que en la pintura se manifestaba un misterio. Había algo que me hablaba desde un lugar profundo, y ese lugar sin duda debía de estar dentro mío, ya que la obra era algo externo a mi, yo siempre cito una frase de Federico Fellini que dice que “El arte es el rumor de un mar que no podemos ver.” Creo que esa es una buena aproximación ya que no podemos definir con precisión de que se trata el fenómeno artístico, la prueba es que a pesar de que durante milenios se ha venido hablando de arte, nadie puede crear una obra de arte porque se haya tragado toda la teoría del arte. En la Escuela Nacional de Bellas Artes a la cual asití, a los egresados no se les entregaba un diploma de artista, sino que se les entregaba un certificado de asistencia a los seis años que duraba el curso. Haber asistido al curso no era una garantía de que el alumno iba a ser un artista. Solo se le habían enseñado los rudimentos básicos con los cuales el mismo podría comenzar a trabajar. Creo que el trabajo del artista es comenzar el duro camino hacia la libertad, un camino durante el cual aprendemos a liberarnos de todo prejuicio artístico, hasta darnos cuenta de que la vieja frase del poeta: “Caminante no hay camino…..” sigue teniendo vigencia. No hay caminos prefabricados, el camino hacia la libertad es individual. Se dice que los seres humanos somos libres hasta el límite de nuestra piel, yo digo que ni hasta ahí somos libres, porque del límite de nuestra piel hacia dentro tampoco somos libres ya que estamos expuestos a los dictados físicos de nuestro cuerpo a la formación previa y los límites psíquicos que nos impone la educación, de ahí que la única posibilidad de libertad yo la encontré en la pintura.
Bien, entonces comenzamos a transitar el camino hacia el develar el misterio del arte, un camino difícil, tan difícil que a lo largo del mismo tratamos de aprehender de todo para tratar de aprender a pintar, el resultado final de todo eso es un proceso parecido al del alquimista , el cual tratando de encontrar la piedra filosofal con la cual transmutar la materia, termina por descubrir que la verdadera transmutación se produjo en el mismo. Así que el arte se termina transformando en un proceso mágico, tan mágico como la Creación, porque en este universo todo es mágico, sólo que estamos tan inundados por la magia que dejamos de verla, un amanecer, algo tan común como para que ocurra rutinariamente todos los días, nos hace perder esa visión mágica del universo, una pequeña semilla puesta bajo la tierra, unos años mas tarde se transforma en un árbol de 20 metros de altura, eso cualquiera lo sabe , así que en consecuencia eso le hace perder toda validez mágica, pero si yo entierro una semilla y digo “Abracadabra” y en forma instantánea apareciese el árbol, entonces diríamos que es magia pura. Pero no es menos mágico que ese proceso dure 10 años en lugar de 10 segundos. El proceso creativo del artista no es menos mágico, el pintor se para frente al caballete con sus herramientas y al terminar el día sobre el lienzo blanco aparece mágicamente una obra de arte, salida de un lugar desconocido al cual el artista aprendió a ir. No sabe el camino pero sabe como ir. Un contacto con la fuente de la creación, una meditación con operatividad, una forma de contactar con la Deidad creadora y desde ahí poder recrear el mundo, y cuando me refiero a recrear lo hago como algo práctico y funcional, se ha dicho muchas veces que la realidad imita el arte y eso no es un juego de palabras, para mencionar un ejemplo simple cito a Cortazar cuando en Rayuela menciona que : “ La Maga se agacho en la playa y recogió un guijarro” Miró… es un ejemplo simple de como un pintor puede ayudarnos a ver una forma de la naturaleza desde una óptica diferente. El arte puede ser funcional y podría modificar nuestra percepción de la realidad y de ese modo cambiar el mundo, y no lo digo simbólicamente sino que me refiero a un cambio real del mundo tangible.
Y eso que nos parecía imposible debido al concepto de que vivimos en un mundo materialmente sólido, se hace mas entendible hoy en día debido a los últimos descubrimientos dentro de la física cuántica que nos demuestran que vivimos en un mundo de energía, un mundo construído solamente por vibraciones electromagnéticas donde no existe materia sólida sino que vivimos en un universo de vibraciones, como mencionaba Carlos Castañeda citando a Don Juan: “No vivimos en un mundo de objetos, vivimos dentro de las emanaciones del Águila.” Partiendo de esa base el artista podría modificar la realidad mostrando los universos posibles a través del arte. Usando el mismo como una forma de manipular la realidad abriendo nuevos caminos “al andar.”
Misterio, vivimos en un mundo de un misterio insondable, un mar de misterio donde los pintores navegamos buscando el rumbo correcto usando un pincel como brújula..